viernes, 16 de octubre de 2009

Cines de Barrio

Los cines de barrio vivieron su época de oro entre los años 1930 y 1950.

Fue así que en 1930 se inauguró el Cine Edén de San Andrés, en Ayacucho 350, ofreciendo funciones de teatro, cine, bailes y hasta boxeo. Ésta fue la primera sala de espectáculos, además tuvo entre sus contratados a Carlos Gardel.

La zona más importante de Villa Ballester llegó a tener cuatro cines: el Cine Mitre, donde actualmente está el supermercado Carrefour de Chilavert; el Cine Sarmiento que se incendió, fue demolido y allí se construyeron locales; el Cine Majestic, que actualmente es un templo evangelista y el cine América.

A su vez, San Martín contaba con el Ateneo, de Sanguinetti; el Moderno, en el que también cantó el Zorzal Criollo y estaba ubicado donde actualmente se ubica la sede de la Sociedad Italiana; el Cine-Teatro Gran Plaza y el Moreno, situado cerca de la estación de trenes. La mayoría también funcionaba como teatro.

Al respecto, el Sr. Rubén Silva, vecino de Villa Lynch donde se encontraba el cine Azcuénaga, recuerda: “Antiguamente se anunciaba por las calles la película que se iba a estrenar, venían con un equipo en un coche e instalaban una pantalla. La gente llevaba su propio banquito para sentarse”.

Por otra parte, en el telón de los cines se colocaban anuncios publicitarios de comercios de la zona, entre ellos: Casa Menini Hnos, Italmodas, Farmacia Alemana y Peleterías Claudia.

En aquellos años 40 no había un solo chico que se perdiera las continuadas de cowboys o una parejita que dejara pasar una película de amor. También estaban las comedias nacionales y de a poco llegaron los musicales de Hollywood.

“Lo que más recuerdo son los Cines Sarmiento y Majestic. Mi abuela me llevaba los miércoles porque era el día de damas, era más barato y podía ver tres películas continuadas”, cuenta Luisa González, vecina de Villa Ballester.

Ir a los cines de barrio siempre fue una fiesta, hasta que las salas se fueron transformando en estacionamientos de templosos supermercados.

La televisión y el video fueron un gran golpe. Y los shoppings terminaron de hundirlos.

Hoy por hoy sólo existen dos cines en el municipio. El Cultural Plaza, inaugurado como Cine Teatro Gran Plaza en 1938 por la empresa de los Hermanos Márquez, era la más moderna sala de San Martín hasta que cerró sus puertas durante la crisis de los ´90. Fue adquirido por el Municipio y reinaugurado el 24 de mayo de 1993 ya convertido en Centro Cultural. Cuenta con dos salas: José Hernández y Leopoldo Torre Nilsson, ofrece teatro, cine, música, ópera, danzas y exposiciones de plástica. El cine José Hernández, situado en Villa Ballester, nació en 1993 de la mano de Alberto Soteras. En 1985, las autoridades del colegio José Hernández, donde había hecho la secundaria, le propusieron que armara una sala de cine en el teatro escolar. No lo dudó: vendió su batería y compró sus primeros equipos. Le tomó ocho años armar el cine.

Mas allá del paso del tiempo, de los avances de la tecnología y de los cambios en nuestros hábitos sociales, aquellas salas de los cines de barrio seguirán siendo el continente que alberga los mas hermosos recuerdos de quienes desde una de sus butacas eran capaces de recorrer el mundo entero en un abrir y cerrar de ojos.


Anabela Caggiano
anabela.caggiano@hotmail.es

Leandro Saldivia